Cayó frente a mi la luna,
no me di cuenta.
Estiró los zarcillos
el mburucuyá.
Abrió lentamente
los pétalos la rosa.
Titilaron todas las estrellas.
Una gota se perdió
en la acera.
Alguien trazó
un dibujo,
con un lápiz.
Croaron las ranas
en la zanja.
Una cuchara
giró en círculos.
Las hojas del árbol
cayeron en la vereda.
Pompas blancas
eran el soporte
de las lánguidas
semillas.
Un niño tendió
su mano.
Dos perros ladraron,
al unísono.
El libro quedó
sobre el banco
de la plaza.
Alguien corrió,
alguien lo vio pasar.
Un ojo guiñó.
Dos brazos se extendieron.
Giró el cuello.
En la laguna
se rompió la luna.
Y no me di cuenta.
Todo porque
bajaron los salarios.
El trabajo no es
el apropiado
El tránsito en la ciudad
es un caos.
Ya no llegan cartas
a los buzones, sólo
arriban boletas de
servicios.
Hay mendigos en
la catedral ostentosa.
La madrugada
se pobló de ruidos.
Las noticias son
siempre malas.
El café se terminó.
Hay polillas en la
habitación.
No pudo aprobar
el examen.
Hubo corrillos
en tribunales.
La casa gris
decidió por otros.
En el campo
se acabaron los fardos.
Un ladrón se multiplicó
varias veces.
La vida en la ciudad
es estre-llan-te.
Las sonrisas se
parecen cada vez más
a las muecas....o es al
revés.
En televisión escasean
las ideas.
Hay escaso periodismo
independiente.
Los megamercados
ganan la partida.
Un cúmulo de horas
no implican buen salario.
Las jubilaciones están
patitiesas.
...
Y bien, qué hacer...
el mundo rueda que rueda,
eterno ciclo redondeado.
Caderas anchas,
nueve lunas,
primer sollozo.
Arduo camino,
y bien...aún así...
aparece el sol
cada aurora,
brilla la luna
para mi dicha y
mi desdicha.
Aunque no estés
aquí,
aunque ya nunca
vuelvas,
seguirán titilando
las estrellas,
brotará mi voz,
volarán las aves,
el agua salpicará
mi falda
y caerá el barranco
cada tanto;
y la luna, oh...esa luna
que se quebró en el lago
renacerá prodigiosa,
para salvarme
otra vez...del olvido.***
no me di cuenta.
Estiró los zarcillos
el mburucuyá.
Abrió lentamente
los pétalos la rosa.
Titilaron todas las estrellas.
Una gota se perdió
en la acera.
Alguien trazó
un dibujo,
con un lápiz.
Croaron las ranas
en la zanja.
Una cuchara
giró en círculos.
Las hojas del árbol
cayeron en la vereda.
Pompas blancas
eran el soporte
de las lánguidas
semillas.
Un niño tendió
su mano.
Dos perros ladraron,
al unísono.
El libro quedó
sobre el banco
de la plaza.
Alguien corrió,
alguien lo vio pasar.
Un ojo guiñó.
Dos brazos se extendieron.
Giró el cuello.
En la laguna
se rompió la luna.
Y no me di cuenta.
Todo porque
bajaron los salarios.
El trabajo no es
el apropiado
El tránsito en la ciudad
es un caos.
Ya no llegan cartas
a los buzones, sólo
arriban boletas de
servicios.
Hay mendigos en
la catedral ostentosa.
La madrugada
se pobló de ruidos.
Las noticias son
siempre malas.
El café se terminó.
Hay polillas en la
habitación.
No pudo aprobar
el examen.
Hubo corrillos
en tribunales.
La casa gris
decidió por otros.
En el campo
se acabaron los fardos.
Un ladrón se multiplicó
varias veces.
La vida en la ciudad
es estre-llan-te.
Las sonrisas se
parecen cada vez más
a las muecas....o es al
revés.
En televisión escasean
las ideas.
Hay escaso periodismo
independiente.
Los megamercados
ganan la partida.
Un cúmulo de horas
no implican buen salario.
Las jubilaciones están
patitiesas.
...
Y bien, qué hacer...
el mundo rueda que rueda,
eterno ciclo redondeado.
Caderas anchas,
nueve lunas,
primer sollozo.
Arduo camino,
y bien...aún así...
aparece el sol
cada aurora,
brilla la luna
para mi dicha y
mi desdicha.
Aunque no estés
aquí,
aunque ya nunca
vuelvas,
seguirán titilando
las estrellas,
brotará mi voz,
volarán las aves,
el agua salpicará
mi falda
y caerá el barranco
cada tanto;
y la luna, oh...esa luna
que se quebró en el lago
renacerá prodigiosa,
para salvarme
luna, lunita, muestra tu cara...la que me ocultas... |
Que lindo Mabel!!! Cuantas cosas bellas nos perdemos por andar perdidos en tantas miserias...Pero lo bueno es que cuando levantamos la cabeza, ahí siguen estando para nosotros...aunque a veces nos perdemos cosas que nunca volverán.
ResponderBorrarEn cualquier caso la vida sigue su rumbo y nos trae con ella cosas maravillosas....Me gustó mucho la segunda parte, caderas anchas....primer sollozo, arduo camino...Pero si estamos acompañados mucho menos arduo. Un Abrazo.
Así lo pienso...estamos vivos, cada amanecer es una posibilidad diferente, la vida se despliega, cuál abanico. No es fácil, no...¿quién aseguró algún día lo contrario?
ResponderBorrarY claro, comparto con vos, si es junto a otros el camino puede resultar más sorprendente, más llevadero el cansancio, risa y llanto, dos caras diferentes que se necesitan la una a la otra.
Va abrazo y agradecimiento por tus palabras!!!