Sentado allí, a la orilla de la nada,
con esa expresión tan dolorosa
que me impidió verte en tu versión de niño...
Eras como la última brasa convertida en ceniza gris,
como la úlcera cruel de un dolor que se arrastra,
como grilletes pesados del sinsentido.
Y yo...que sin comprenderte tanto te he descifrado,
sentí que ya no había palabras, que habían muerto
los discursos, que mi imaginación no podía
fabricarte un mundo, dotarlo de sentido y
prestártelo...como cuando éramos chicos.
Entonces me derrotó el cansancio,
el llanto hizo un nudo fuerte en mi garganta,
no quise verte así...tan derrotado...***
Texto y fotografía:
mao.
con esa expresión tan dolorosa
que me impidió verte en tu versión de niño...
Eras como la última brasa convertida en ceniza gris,
como la úlcera cruel de un dolor que se arrastra,
como grilletes pesados del sinsentido.
Y yo...que sin comprenderte tanto te he descifrado,
sentí que ya no había palabras, que habían muerto
los discursos, que mi imaginación no podía
fabricarte un mundo, dotarlo de sentido y
prestártelo...como cuando éramos chicos.
Entonces me derrotó el cansancio,
el llanto hizo un nudo fuerte en mi garganta,
no quise verte así...tan derrotado...***
Texto y fotografía:
mao.
Y recordé cómo giraban las ondas del agua en los huecos infinitos del arroyo... |
muy hermoso texto
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