De adiós sin adiós...

Fuera de mi, lejos de mi,
descentrada.
Triste de mi, congoja de mi,
quedamente.
Como una ola encrespada,
como el viento entre las grietas.
Sola de mis sueños,
en soledad de ti,
abismada en mi cripta,
rasgada de adiós,
sollozante de imposibles,
decepcionada de ilusiones,
abanico de tiempo,
horas y horas,
reloj mecánico,
minuto final,
instante,
quietud.

...
Ventanal de imágenes.
Puerta con figuras,
picaporte de llegada,
cerrojos de partida.

...

Un hueco de vacío.
Sueño roto.
Ilusión partida.
Manos que se alargan,
despedida sin palabras,
la voz que se ahoga,
silencio que no dice,
abismos de distancia.

...

Trizas de mi,
espejo roto,
fragmentos pasados,
desgarro presente.
Azufre y miel.
Violeta y hiel.
Sopor de todo.
Desgaste del corazón.
Coraza inexpugnable.
Dolor de ocasión.

...

Y allí, en algún lugar,
un saxofón destrona
a los reyes del mal;
un timbre de voz,
un salto de equilibrista,
el delfín en el mar,
tu mano en las mías,
prisionero de mi,
prisionera de ti.
Puede más el arrebol
de lo real,
un trébol de cuatro hojas
cayó en el prado,
aúllan los lobos esteparios,
un elefante pierde a su cría,
se estira mi voz, pero es sólo 
silencio...
silencio de todo,
ausencia de voces,
vestigios de la herida,
sangre derramada.

...

Rasguño del alma.
Aguas quietas,
amortajadas.

...

Así es, así es,
el desamor.***

PICASSO. "Jacqueline". 1954.


                               

TEXTO: M.A.O

Infinitud.

Sola, conmigo...
al borde del camino.
Y hay un sinfín de estrellas,
allí, sobre mí...***

                              

Paisaje de Guiselle. Acuarela. HELENA RAMÍREZ. COSTA RICA.

                                                             







 Texto: M.A.O

Esa...la que fui

Cayó frente a mi la luna,
no me di cuenta.
Estiró los zarcillos
el mburucuyá.
Abrió lentamente
los pétalos la rosa.
Titilaron todas las estrellas.
Una gota se perdió
en la acera.
Alguien trazó
un dibujo,
con un lápiz.
Croaron las ranas
en la zanja.
Una cuchara
giró en círculos.
Las hojas del árbol
cayeron en la vereda.
Pompas blancas
eran el soporte
de las lánguidas
semillas.
Un niño tendió
su mano.
Dos perros ladraron,
al unísono.
El libro quedó
sobre el banco 
de la plaza.
Alguien corrió,
alguien lo vio pasar.
Un ojo guiñó. 
Dos brazos se extendieron.
Giró el cuello.
En la laguna
se rompió la luna.
Y no me di cuenta.
Todo porque
bajaron los salarios.
El trabajo no es 
el apropiado
El tránsito en la ciudad
es un caos.
Ya no llegan cartas
a los buzones, sólo
arriban boletas de 
servicios.
Hay mendigos en 
la catedral ostentosa.
La madrugada
se pobló de ruidos.
Las noticias son 
siempre malas.
El café se terminó.
Hay polillas en la
habitación.
No pudo aprobar
el examen.
Hubo corrillos
en tribunales.
La casa gris
decidió por otros.
En el campo
se acabaron los fardos.
Un ladrón se multiplicó
varias veces.
La vida en la ciudad
es estre-llan-te.
Las sonrisas se 
parecen cada vez más
a las muecas....o es al
revés.
En televisión escasean
las ideas.
Hay escaso periodismo
independiente.
Los megamercados
ganan la partida.
Un cúmulo de horas
no implican buen salario.
Las jubilaciones están
patitiesas.
...
Y bien, qué hacer...
el mundo rueda que rueda,
eterno ciclo redondeado.
Caderas anchas, 
nueve lunas,
primer sollozo.
Arduo camino,
y bien...aún así...
aparece el sol
cada aurora,
brilla la luna
para mi dicha y
mi desdicha.
Aunque no estés
aquí,
aunque ya nunca
vuelvas,
seguirán titilando
las estrellas,
brotará mi voz,
volarán las aves,
el agua salpicará
mi falda
y caerá el barranco
cada tanto;
y la luna, oh...esa luna
que se quebró en el lago
renacerá prodigiosa,
para salvarme

luna, lunita, muestra tu cara...la que me ocultas...

otra vez...del olvido.***

DESATINO.

...Una sola palabra: basta,
y todo se detiene, lo que fue
hasta entonces deja de ser,
por dentro se hace jirones
el alma, el corazón, los órganos
todos, parece que el dolor
será tan inmenso que no
se soportorá...
sin embargo no es así,
la herida sangra,
comienza a limpiarse,
hay una descompresión,
un paulatino alivio.
De pronto la verdad
muestra una de sus caras:
la verdadera para la ocasión,
y las lágrimas ayudan,
lavan,
lavan,
limpian,
arrasan,
llevan,
acarician,
duelen,
alivian.
Todo acaba con la conciencia
de la desesperanza,
caído el velo
es imposible
la recuperación.
El objeto amado
se diluye,
el sujeto se
transforma,
he ahí, era eso,
nada más que eso...
Constataciones,
el sueño cae,
estrepitosamente,
se triza,
triza el aire,
dolorosamente.
Era una gran plataforma,
con formas,
ausente de todo,
girando a su ritmo,
dando el concierto
esperado,
la pincelada exacta,
los colores más bellos...
pero no era,
era mentira,
la mentira mostró
su flanco débil,
expuso la burla,
demostró el teorema
del absurdo,
trajo aparejada
mareas sin destino,
caricias sin albergue,
besos huérfanos.
Y una masa enorme,
deforme,
oscura,
se abstuvo de esconderse,
mostró su fealdad,
dijo: aquí estoy.
Se desmoronó la risa,
despotricó el discurso,
el gesto se suspendió
en el aire,
no hubo mañana,
dejó de ser el presente,
un mar derramó
en la costa de nadie
su manto de gotas
frías,
murióse lo empático,
sollozó la confluencia,
azotó el recuerdo
los instantes más bellos.

Murió el amor.
Desangrada yace
la esperanza.

Y dijo adiós,
en todos los idiomas
y en ninguno conocido.

Y fue el final,
no quiso,
fue,
era impostergable,
patente,
una mueca obtusa
del destino...***

                                                                                  TEXTO: M.A.O

DESGARRO.

Qué pude hacer y no hice,
por qué la evidencia es tan clara después,
cuando ya no es posible regresar.
Vuelta atrás, un giro,
un completo giro de olvidos
y recuerdos.
Captar el dolor,
hacer algo,
reaccionar.
Por qué hay quiénes
sólo piden sin palabras,
un gemido,
una mirada,
un hastío profundo, abísmico.
Lo más probable
es no ver,
no ver por no querer,
no querer por no saber,
no saber por no sufrir,
no sufrir,
y nada...

Era tan evidente
su partida,
pero no pude verla
hasta que sólo
el hueco que dejó
fue lo que mi mano
pudo palpar.

Y no hubo adiós.
Y no hubo llanto.
Sólo esta congoja
que no cesa,
herida abierta,
savia que fluye,
ausencia.***

Al costado.

Estalló en llanto.

Lágrimas de niño, contenidas.

En un ánfora oscura,

detalles de vida.

Ojos grandes,

mirada queda,

tristeza infinita.
Subió al bus,
repartió tarjetitas,
"muchas gracias"
"gracias"; "gracias";
moneditas tintineantes,
esperanza pobre,
realidad cortante,
casucha, no hogar,
manitas sucias,
piel cetrina,
camiseta roja,
furia, 
serena furia
del pequeño desheredado.***

él, espera, de tanto en tanto cree...

Juanito sueña, sueña y vuela, con el efímero vuelo de la mariposa...




                                                             TEXTOS:  M.A.O
PINTURAS: ANTONIO BERNI.